Se engallan embajadas

Rusia.- Las embajadas de Rusia y EU en México se engallaron y cruzaron acusaciones a través de redes sociales por el supuesto envío de tropas a la guerra en Ucrania.

En un comunicado, la representación diplomática del gobierno de Vladímir Putin acusó que Washington recluta a narcotraficantes mexicanos y colombianos para enviarlos a combatir en el conflicto en Ucrania, a cambio de “amnistía total”.

En respuesta, la legación estadunidense respondió a través de X: “Como dicen por ahí, la calumnia cuando no mancha, tizna”.

Rusia explicó que su Servicio de Inteligencia Exterior (SVR) ha detectado que “empresas militares privadas de EU (bajo la dirección de la Administración Federal Antidrogas y el FBI) están reclutando en las cárceles a representantes de los cárteles de la droga mexicanos y colombianos para que participen en el conflicto de Ucrania del lado de las fuerzas armadas” del gobierno de Volodímir Zelenski.

Precisó que “el primer lote de un par de cientos de esos matones está programado para ser lanzado a la zona de combate en el verano de este año”. Acusó que si aceptan el “viaje de negocios, a los prisioneros reclutados en las cárceles estadunidenses se les promete una amnistía total con la esperanza de que nunca regresen.

“El SVR señaló que la posibilidad de que tales criminales se unan a las filas de las fuerzas armadas ucranianas es sin duda alarmante, pero tal intento de Washington de dar a Kiev una ventaja en el campo de batalla está condenado al fracaso.

“El servicio de inteligencia añadió que la administración del presidente estadunidense, Joe Biden, en realidad está mostrando su impotencia y demostrando una vez más el fracaso del “régimen de Kiev al que alimenta”, señaló la embajada rusa.

En su reporte, el SVR abundó que “Estados Unidos acude a métodos cada vez más desesperados en sus intentos de cambiar la situación en el frente ucraniano, al reforzar las filas de los militares ucranianos desmovilizados con escoria multinacional con tendencias a la violencia armada”.

Tras admitir que “las perspectivas de una nueva inyección de soldados de fortuna escogidos entre asesinos en serie, drogadictos y violadores (...) genera preocupación”, el SVR alertó que “si el proyecto piloto (...) resulta, el programa de reclutamiento de matarifes continuará y se ampliará con el llamamiento de criminales de otros países con cargos graves de delincuencia”.

Sin embargo, señaló que este proceso atraviesa dificultades, ya que “las negociaciones con los narcobarones son difíciles” y ningún criminal se atreve a cooperar con las autoridades estadunidenses sin el beneplácito de sus jefes.

Ante estos señalamientos, la embajada de EU se limitó a postear: “Como dicen por ahí, la calumnia cuando no mancha, tizna. Que no te vean la cara”.