
Ciudad de México.- El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, aclaró este martes que la eliminación de la lista de sanciones emitida por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) es una decisión exclusiva de las autoridades estadounidenses.
“Fue un error de Estados Unidos”, afirmó el funcionario al ser cuestionado sobre la desaparición del documento que relacionaba al cártel de “La Mayiza” con redes de corrupción política y lavado de dinero en Playas de Rosarito, Baja California. Entre los nombres incluidos estaba el de la diputada federal de Morena, Hilda Araceli Brown Figueredo, señalada como posible colaboradora de la red criminal.
Por su parte, la presidenta Claudia Sheinbaum respaldó la postura de Harfuch y señaló que México actúa conforme a la información oficial que recibe de Estados Unidos. Explicó que las autoridades estadounidenses envían datos a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) o a la Secretaría de Hacienda, que realizan sus propias investigaciones y, en caso de detectar irregularidades o lavado de dinero, pueden congelar cuentas mediante los mecanismos legales correspondientes. La mandataria añadió que ambos países mantienen coordinación en la lucha contra la delincuencia organizada.

El 18 de septiembre, el Departamento del Tesoro había publicado un organigrama digital que señalaba a cinco personas y 15 empresas presuntamente involucradas en lavado de dinero en Baja California, incluyendo a Hilda Araceli Brown y a un hombre identificado como Mario Alberto Herrera Sánchez, así como negocios en Playas de Rosarito ligados a la facción de Los Mayos del Cártel de Sinaloa. Sin embargo, pocos días después, el documento fue retirado tras detectarse errores en la identificación de uno de los señalados.
Entre los afectados se encuentra un barbero de Ensenada que comparte nombre con uno de los acusados. Aclaró a la revista Proceso que la imagen y los datos que aparecieron en el documento no le corresponden y que la confusión ha generado problemas personales y profesionales, por lo que pidió a las autoridades estadounidenses rectificar la información.

El documento del Tesoro también señalaba que la estructura financiera de los hermanos Arzate García, aliados de Los Mayos, utilizaba bares, restaurantes y negocios turísticos como fachadas para mover recursos ilícitos. Entre los principales operadores estaba Jesús González Lomelí, propietario de Bombay Beach Club, Coco Beach Club y Mariscos El Caimán, identificado como enlace financiero de mandos del Cártel de Sinaloa, incluido un líder conocido como “El Ruso”.