
Michoacán.- El asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, continúa generando repercusiones políticas y sociales en Michoacán. A pesar de contar con protección federal y municipal, el edil fue asesinado durante las celebraciones del Día de Muertos, en un hecho que ha encendido las alarmas sobre la efectividad de las estrategias de seguridad en la región.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, informó que desde diciembre de 2024, Manzo contaba con escolta federal y municipal, la cual fue reforzada en mayo de 2025 con 14 elementos de la Guardia Nacional y dos vehículos oficiales.
De acuerdo con las investigaciones, el arma utilizada en el ataque está vinculada con otros dos hechos violentos registrados previamente entre grupos criminales en Michoacán. Las autoridades confirmaron la detención de dos personas presuntamente involucradas, mientras que uno de los agresores perdió la vida durante el operativo.

En tanto, el Gabinete de Seguridad Federal sesionó de manera urgente en Palacio Nacional, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien instruyó reforzar la presencia de fuerzas federales en Uruapan y acelerar las investigaciones. Durante el funeral del alcalde, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, fue abucheado por ciudadanos que exigían justicia.
Las autoridades estatales y federales reiteraron su compromiso de esclarecer el crimen y garantizar la seguridad en la zona. “No habrá impunidad”, aseguró García Harfuch en un mensaje público.