
Caribe.- El Pentágono sabía que había sobrevivientes tras un ataque el 2 de septiembre contra un presunto barco cargado de drogas en el Mar Caribe, pero aun así el Ejército estadounidense lanzó un segundo operativo, según fuentes familiarizadas con el caso. Estas ofensivas, iniciadas en septiembre, ya han dejado más de 80 muertos y destruyeron 20 lanchas, lo que críticos califican de ejecuciones extrajudiciales incluso si apuntaban a criminales.
La justificación del segundo ataque fue hundir el buque, aunque la administración Trump sostiene que las 11 personas a bordo murieron. Aún no está claro quién ordenó los ataques ni si el secretario de Defensa, Pete Hegseth, estuvo directamente involucrado. El Congreso revisará el caso en una sesión clasificada con el almirante Frank Mitch Bradley, quien ejecutó la operación según la administración.

La Casa Blanca defiende a Hegseth. La portavoz Karoline Leavitt aseguró que el ataque se realizó en aguas internacionales y conforme a las leyes de guerra, y que Hegseth autorizó al almirante Bradley a llevar a cabo la operación. Hegseth, por su parte, dijo que el segundo ataque surgió en la "niebla de la guerra" y que no vio sobrevivientes, aunque no permaneció en la zona durante la misión.
Expertos legales y legisladores cuestionan la legalidad del ataque, argumentando que pudo violar las leyes de conflictos armados, mientras el secretario enfrenta creciente escrutinio por los operativos contra presuntos narcotraficantes en el Caribe y el Pacífico oriental.
Earlier this morning, on my Orders, U.S. Military Forces conducted a kinetic strike against positively identified Tren de Aragua Narcoterrorists in the SOUTHCOM area of responsibility. TDA is a designated Foreign Terrorist Organization, operating under the control of Nicolas… pic.twitter.com/2bEDDiZsRl
— Commentary: Trump Truth Social Posts On X (@TrumpTruthOnX) September 2, 2025