
Ciudad de México.- Ángela Aguilar está esperando que tenga efecto la terapia que está tomando para poder salir sola a la calle de nuevo, pues el temor que aún siente de ir al súper —a pesar de que es una actividad que disfruta mucho— es una consecuencia de la ansiedad que sufre desde hace un tiempo. La cantante, incluso, bajó 10 kilos debido a esa ansiedad.
Así lo contó en entrevista con Ventaneando, donde le reveló a Pati Chapoy que dejó de ir al súper, pues se dio cuenta de que mucha gente la grababa cuando caminaba por los pasillos.
"Recientemente me ha causado mucha ansiedad salir al público. Me pasó que entraba al súper —estoy acostumbrada a no estar arreglada y estar tranquila, siempre bien vestida pero no maquillada—, y veía a mucha gente que me grababa en los pasillos. No era como tomarse una foto con alguien, sino que me grababan, y me daban ataques de ansiedad, entonces dejé de ir al súper un rato", confesó.

Ángela admitió al programa de Azteca que ella puede camuflarse más fácilmente, algo que no resulta tan sencillo para su esposo Christian Nodal, pues, dice, los tatuajes en todo su cuerpo lo delatan.
Esa ansiedad que ha sentido en público, asegura, nunca antes la había vivido, a pesar de que desde niña ha estado en ambientes públicos junto a su padre, Pepe Aguilar.

"Se tornó todo muy negativo. Antes no tenía eso, estaba muy tranquila; ahorita sí me da miedo porque la gente es muy cruel, agresiva, y ni me conocen", reflexionó.
A pesar de que no ha sido todo miel sobre hojuelas, Ángela está disfrutando al máximo su vida de casada. Por eso, aunque enfrenta aspectos negativos como el hate en redes —del cual procura no enterarse—, considera que es muy bendecida por tener una familia como la que tiene.
"A veces es difícil, pero sigo siendo muy bendecida, y estoy venciendo mis miedos y siguiendo mis sueños", dijo.