
Moldavia.- Celebró elecciones legislativas y el bloque de la presidenta Maia Sandu obtuvo una contundente victoria, que tiene no solo implicaciones locales, sino geopolíticas, pues derrotó a las fuerzas políticas apoyadas y financiadas por Rusia, impidiendo la entrada de un gobierno alineado a Putin.
La Rusia de Vladimir Putin se llevó una derrota política el domingo. Ganó el bloque de la presidenta Maia Sandu y el Partido Acción y Solidaridad (PAS), de corte liberal.
El PAS ganó con el 48% de los votos y mantendrá la mayoría en el Parlamento, sacando 21 puntos de ventaja al bloque pro-ruso y socialista.
Con este resultado, el país mantiene su camino para integrarse a la Unión Europea y alejarse de la influencia del Kremlin.

Moldavia es un pequeño país de casi 2.4 millones de habitantes que estuvo bajo dominio soviético, ubicado al suroeste de Ucrania. Es considerado el próximo objetivo de Rusia al finalizar o avanzar en su invasión sobre territorio ucraniano.
Las elecciones se volvieron ya no un asunto meramente de política doméstica, sino un asunto geopolítico.
El país recibió más de 14 millones de ciberataques desde Rusia antes de las elecciones. Un partido político alineado al Kremlin fue impedido de participar por financiamiento irregular.

Tras los comicios, Maia Sandu declaró en sus redes: “el pueblo moldavo ha hablado. Los resultados de la elección del domingo son claros: los moldavos estamos unidos en nuestro deseo de paz, democracia y Europa, y en el coraje para defenderlo”.
A partir de la invasión rusa a Ucrania, el gobierno moldavo buscó acercarse más a Europa por seguridad.