Encapuchados roban joyas del Museo del Louvre
Francia.- El Museo del Louvre, considerado el más visitado del mundo, fue escenario de un audaz robo a su colección de joyería la mañana de este domingo.
La ministra francesa de Cultura, Rachida Dati, confirmó el hecho y señaló que, durante la huida, los responsables perdieron una de las piezas sustraídas, que se presume corresponde a la corona de la emperatriz Eugenia.
Detalles del robo
El incidente, clasificado por las autoridades como un robo y no como un asalto violento, provocó el cierre inmediato del museo durante toda la jornada para permitir las investigaciones y preservar las evidencias.
En entrevista Dati confirmó que se recuperó una joya que actualmente está siendo evaluada, aunque evitó dar detalles sobre cuál se trata. Sin embargo, el diario Le Parisien informó que la pieza hallada es la corona de la emperatriz Eugenia, encontrada con daños visibles.
La ministra subrayó que el valor de las piezas sustraídas, expuestas en la Galería de Apolo —donde se exhiben joyas de Napoleón y de los reyes franceses—, es “incalculable”.
Cómo se ejecutó el robo
Fuentes del Louvre indicaron a la agencia EFE que la operación se llevó a cabo de forma muy rápida y con precisión, lo que apunta a que fue ejecutada por profesionales.
Los ladrones ingresaron al museo pocos minutos después de su apertura oficial, a las 9:30 de la mañana, accediendo desde la zona junto al río Sena, donde actualmente se realizan trabajos de mantenimiento. Según utilizaron un montacargas para llegar al primer piso y forzaron una ventana para entrar en la Galería de Apolo.
Con las joyas en su poder, huyeron en dos motocicletas por el mismo punto de acceso. La ministra Dati recalcó que todo ocurrió sin violencia y que el público fue evacuado con calma y de manera profesional.
El ministro del Interior, Laurent Núñez, acudió al lugar mientras la policía desalojaba el área de la Pirámide. Dati reconoció que el alto valor del patrimonio francés convierte a sus museos en un objetivo constante para la delincuencia, señalando además que la vulnerabilidad del Louvre es un problema de larga data.
Este robo ocurre en un momento en que se evalúa la infraestructura del museo, cuya estructura, concebida en los años 80 para recibir a 4 millones de visitantes, ahora se encuentra saturada por los 8.7 millones de personas que lo visitaron el año pasado.