
Chihuahua, Chih.-Las negociaciones entre productores del campo, transportistas y autoridades federales permanecen estancadas, mientras las protestas —que incluyen bloqueos en carreteras, vías férreas y aduanas— están por cumplir 48 horas, generando afectaciones económicas significativas.
Empresas y operadores que subestimaron la duración de las manifestaciones ahora enfrentan serias complicaciones logísticas y pérdidas derivadas de la interrupción prolongada en el tránsito de mercancías.
En el municipio de Meoqui, específicamente en el tramo Cárdenas–Bachimba de la carretera Chihuahua–Delicias, se observa una extensa fila de tráileres que evidencia la magnitud del bloqueo. La circulación de transporte de carga, personal y vehículos particulares está completamente detenida.
Los conductores, varados desde el pasado lunes por la mañana, han tenido que improvisar para cubrir necesidades básicas, mientras intentan evitar que sus cargas se deterioren. Aunque desesperados, muchos expresan comprender las demandas del movimiento campesino y de organizaciones transportistas.

Debido a la falta de información oportuna, varios operadores han intentado buscar rutas alternas hacia el sur del estado; sin embargo, la maniobra es limitada por las condiciones del camino y el tamaño de las unidades. Algunos han recorrido largos trayectos a pie para abastecerse en comercios locales o han sido apoyados por los manifestantes, quienes comparten alimentos preparados en el lugar.
En sentido contrario, de Delicias hacia la capital, la vía luce despejada, pues numerosos conductores han optado por regresar o esperar a que mejoren las condiciones de tránsito, lo que evidencia el impacto territorial del bloqueo.