Gobierno al borde del cierre
Washington, Estados Unidos.- Washington enfrenta la posibilidad de un cierre gubernamental luego de que republicanos y demócratas no lograron un acuerdo para extender la financiación más allá de la medianoche de este martes.
El Senado, bajo control republicano, sometió a votación un proyecto de gastos temporales que ya había fracasado anteriormente. Los demócratas buscaban incluir en la iniciativa la ampliación de beneficios de salud para millones de ciudadanos que expiran a fin de año, mientras que los republicanos insistieron en discutir ese tema en otro momento. Ante la falta de consenso, las agencias federales prepararon planes de contingencia que contemplan suspender servicios como atención al cliente, proyectos de investigación científica y otras actividades no catalogadas como “esenciales”, lo que enviaría a miles de empleados a sus hogares.
El Departamento de Trabajo, por ejemplo, anunció que no publicará su informe mensual sobre el desempleo, considerado un indicador clave de la situación económica.
Cualquier solución de última hora también tendría que pasar por la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, la cual no sesionará hasta el miércoles 1 de octubre, cuando ya habría vencido el actual presupuesto.
Un conflicto recurrente en EE. UU.
Los enfrentamientos políticos por el presupuesto federal se han vuelto frecuentes en los últimos años. El cierre más prolongado ocurrió entre 2018 y 2019, durante 35 días en la administración Trump, a raíz de una disputa migratoria.
En juego están 1.7 billones de dólares que financian las operaciones de las agencias federales, una cuarta parte del gasto total de 7 billones, mientras que gran parte del resto se destina a salud, jubilaciones y al pago de intereses de la deuda pública, que ya asciende a 37.5 billones de dólares.
La postura de Trump y sus implicaciones
La actitud del expresidente Trump, quien ha mostrado disposición a ignorar leyes de gasto aprobadas por el Congreso, genera mayor incertidumbre. En primavera instruyó a las agencias a evaluar el despido de trabajadores “no esenciales”, y ha bloqueado la aplicación de miles de millones autorizados por el Congreso, lo que ha elevado las tensiones con los demócratas.
Además, los demócratas buscan blindar las ampliaciones de los subsidios de salud para que Trump no pueda revertirlas si se convierten en ley, así como revertir recortes a la radiodifusión pública y otros programas. Sin embargo, parecían ceder en algunas de estas demandas al inicio de la semana.
Sectores afectados por un cierre
Las aerolíneas han advertido que la paralización del Gobierno podría retrasar vuelos. Parques y museos nacionales también cerrarían, aunque algunos podrían operar temporalmente con fondos propios. Los más de 63 Parques Nacionales del país permanecerían abiertos al público, pero sin guardabosques ni servicios para visitantes.
El Departamento de Educación cerraría en gran medida, al igual que agencias regulatorias como la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Las fuerzas de seguridad, incluyendo al FBI y al Ejército, continuarían sus labores, pero no recibirían salario hasta que se apruebe un presupuesto que permita reabrir totalmente al Gobierno federal.